Sinòpsis
El abundante material sonoro que Luis Diego Cuscoy fue recopilando durante sus indagaciones para la obtención de una imagen científica del aborigen canario se levanta como una de las patas esenciales sobre las que Silvia Navarro y Miguel G. Morales han puesto en pie este ensayo documental que expone la creación de un relato de ficción impuesto al pueblo canario. En su montaje, Ivó Vinuesa y los directores manejan imágenes fechadas entre 1920 y 1970, procedentes de más de treinta fondos, para alumbrar un documental que también reivindica el valor del archivo fílmico como herramienta para analizar el presente.
Fitxa tècnica
Direcció:
Silvia Navarro Martín, Miguel G. Morales
Edició:
Silvia Navarro Martín, Miguel G. Morales
Música:
Juan Carlos Blancas
Festivals i premis
IndieLisboa 2019
Mejor largometraje Internacional
Silvia Navarro Martín, Miguel G. Morales
SILVIA NAVARRO MARTÍN (1986) es socióloga y artista visual. Su trabajo se encuentra inmerso en la diseminación de las capas discursivas que fijan la imagen en una reflexión sobre la construcción de los discursos de poder dentro del relato historiográfico. El material de archivo fotográfico y fílmico como una suerte de arqueología de la imagen para especular sobre el complejo tejido oculto tras los imaginarios colectivos. Desde esta línea ha desarrollado obra expositiva y cinematográfica entendiendo la imagen como un espacio de pensamiento para el desarrollo de investigaciones ensayísticas.
Se adentra en lo cinematográfico a través de los espacios de diálogo que propiciaron colaboraciones cómplice-afectivas con los cineastas Samuel M. Delgado y Helena Girón desde sus primeros trabajos y para los que realiza la Dirección de Arte de su último largometraje Eles transportan a morte. A partir de estas colaboraciones conoce a la productora El Viaje Films para quienes realiza funciones en los departamentos de Casting y Arte.
Pero no es hasta sus primeros trabajos con Miguel G. Morales cuando se adentra en la Dirección a través de dos primeros cortometrajes Juana -una pieza de carácter intimista que retrata un tiempo expandido sobre el cuerpo de una mujer en la isla de El Hierro- y Esclavos sin ser esclavos -una pieza de archivo fílmico y sonoro que abre un diálogo hacia la cuestión colonial-. Será también con M.G.M con quien realiza su primer largometraje De los nombres de las cabras, Mejor largometraje Internacional en IndieLisboa 2019, realizado en su totalidad con material fílmico, fotográfico y sonoro donde las hipótesis de búsqueda de un arqueólogo provocan la inmersión en una experiencia del viaje por los mitos historiográficos que encumbren complejas relaciones de poder a través de los archivos. Actualmente se encuentra colaborando como Directora de Arte para las cineastas María Abenia (Circe) y Macu Machín (La Hojarasca).
Como directora actualmente trabaja en Human Objects, un largometraje como espacio para el ensayo visual.
MIGUEL G. MORALES es un cineasta español nacido en Tenerife, Islas Canarias. Su trabajo se sitúa en la periferia de la no-ficción con un fuerte carácter documental, investigativo y ensayístico. Su formación se desarrolla en Madrid y en la EICTV de San Antonio de los Baños, La Habana, Cuba.
Es precisamente en Cuba donde materializa su primer cortometraje documental El viejo y el lago y comienza a tratar uno de sus temas centrales, la soledad. Sus primeros trabajos centrados en la investigación artística combinan la intervención audiovisual en diferentes proyectos expositivos como los dedicados a la generación de la Segunda República Española vinculada a la revista gaceta de arte y al surrealismo en su isla natal (Aislados, Las dos que se cruzan, Monsieur Domínguez, En el ala del sueño, Una luz en la isla o Los mares petrificados). Otras piezas de ámbito museístico fueron Al Silencio o Iter in semet ipsum donde profundiza en el registro del proceso creativo de varios creadores plásticos. La literatura también fue parte de esta primera etapa con incursiones en los mundos de Ignacio Aldecoa o José Saramago. El pintor y activista medioambiental César Manrique ha sido otra de sus investigaciones, que aún sigue abierta, con películas como Taro. El eco de Manrique, 2012. Obras que se han rodado en diferentes países europeos y se han mostrado en festivales y centros de arte internacionales.
Actualmente, tras cortometrajes como Retina o Hombre que hace que duerme, su mirada es más introspectiva y personal. Termina de trabajar en diferentes proyectos de carácter más etnográfico en la isla de El Hierro, como Pozo Negro o La vida lenta. Con la artista visual S. Navarro Martín, ha colaborado en Juana o Esclavos sin ser esclavos en 2016. Actualmente han presentado su última colaboración, el largometraje documental de carácter experimental De los nombres de las cabras que ha ganado en su premiere mundial el Gran Premio Ciudad de Lisboa al Mejor Largometraje en Indie Lisboa 2019. Alterna estos trabajos cinematográficos con video creaciones, colaboraciones con artistas plásticos o escénicos y diseñando el ámbito audiovisual de diferentes exposiciones.
En 2018 estrenó una video creación llamada Ángel caído, sobre los vestigios de la dictadura española en su isla, obra que se incluye en la exposición colectiva de arte político En medio de su orgullo. En 2019 ha rodado, en Cuba de nuevo, una pieza de ficción llamada Hibakusi-cen, con guion del escritor y poeta cubano Atilio Caballero.